El baile es el arte que conlleva el movimiento del cuerpo en su
totalidad, siempre al compás de una pieza musical. Es considerado como
una forma de expresar y comunicar sensibilidades por medio de las
expresiones corporales.
Algunos de ellos son: Baile de salón: es
el estilo de baile llevada a cabo por una pareja, siempre de manera
armónica y acompañados por la música. Data de una larga historia, en sus
principios era una danza más bien popular, sin embargo en nuestros días
es considerado un deporte llevado a cabo en distintas competencias. Es una danza muy variada ya que pueden serlo tanto el cha cha cha, salsa, lambada, el tango entre muchos otros.
Baile africano: Generalmente se lo distingue entre las
danzas religiosas o sagradas y las profanas. Más allá de su origen hay
características que comparten: sin importar el número de bailarines
forman un solo cuerpo, por lo general en círculo. A su vez el cuerpo se
convierte en un medio para representar o dejar emerger espíritus,
siempre respetándolos. Si bien son bailes que simulan ser alegres y
sencillos son muy intensos y requieren un gran esfuerzo físico.
Baile contemporáneo: si bien utiliza técnicas del
Ballet, surge como forma de rechazo a la danza clásica. Sus
características promover la libertad de expresión y la emancipación,
partiendo de una mayor flexibilidad en el movimiento.
Hip hop: es un tipo de baile que surgió en Estados
Unidos durante la década de los sesenta, acompañando el género musical
que lleva su mismo nombre, hip hop. Se caracteriza por ser un baile
cargado de contenido hispanoamericano y afroamericano ya que su origen
es en barrios populares de Nueva York. A través de este baile se
intenta representar la libertad
Disco: Es un género de baile que surge en las
discotecas o también llamados “nightclubs”, que cobró extrema
popularidad durante los años setenta. Toma muchas características de
bailes latinos. Esto se debe a la integración inmigrantes en la cultura
norteamericana que dotaron los bailes de las discotecas de movimientos
propios de su cultura. Es un baile social acompañado de variados
movimientos y figuras con un constante movimiento de caderas.
Baile tecno: este es un estilo de baile muy reciente,
surge a fines de la década del ochenta acompañando al género musical
conocido como Electrónica o Tecno. El ámbito para ejercerlo generalmente
son las discotecas.
A los niños, desde muy pequeñitos, les encanta bailar.
Es escuchar música y ponerse a bailar, enseguida su cuerpo empieza a
moverse. El baile es una actividad que debemos fomentar porque es muy beneficiosa para los niños, tanto desde el punto de vista físico como psíquico.
El baile es una reacción innata en los niños. Una investigación reciente afirma que los bebes nacen para bailar,
tienen una predisposición natural a moverse al ritmo de la música y que
casualmente cuanto más sincronizan sus movimientos con la música, más
les gusta.
Son movimientos que les provocan placer y que suelen ir acompañados
de una sonrisa, con la ventaja añadida de que se dejan llevar y no
sienten ninguna vergüenza. La propia desinhibición les permite disfrutar
del baile con mayor libertad.
Como tantas otras cosas en la etapa de desarrollo, el baile también
es aprendizaje. Y no hay mejor forma de aprender que disfrutando de lo
que hacemos. Es por eso que el baile es una práctica que debería
fomentarse desde que son muy pequeños, incluso antes de que puedan
ponerse de pie.
Beneficios del baile en los niños
Para empezar, se trata de una actividad física que favorece el ejercicio cardiovascular, además de fortalecer los músculos y mejorar la elasticidad y el sentido del equilibrio.
Por su parte, favorece la coordinación, la memoria y la concentración.
Los movimientos repetitivos y la intención de hacer pasos coordinados
que acompañen a la melodía es un gran estímulo para el desarrollo
psicomotor del niño. Le permite también tener un mayor conocimiento de
su propio esquema corporal.
Contribuye además a adquirir sentido del ritmo y oído musical, y desde el punto de vista social, les ayuda a desinibirse, a hacer nuevos amigos y a una mayor sociabilización.
No hay que olvidarse algo muy importante: que bailar contribuye a mejorar la autoestima, a liberar tensiones y a fortalecer la confianza en sí mismo.
Fomentar el baile entre los más pequeños
Se puede fomentar el baile en los niños desde que son muy pequeños.
Para bailar tiene que haber música, así que tendréis que poner música en
casa, preferentemente con diferentes ritmos (marchosa, rock, hip-hop,
etc.).
Cuando es pequeño, podéis bailar con el bebé en brazos o en un portabebé. Disfrutará del baile en compañía, mientras que lo mecéis al compás de la música.
Más adelante, acompañadle guiando sus movimientos cogiéndole de las manos o haciendo pasos sencillos para que os copien.
Acompañar el ritmo de la música mediante un instrumento musical, o
simplemente dando palmas o chasqueando los dedos, les ayudará a adquirir
mayor sentido del ritmo.
Para los más mayorcitos, podéis buscar vídeos musicales infantiles para que bailen en casa, o bien
recurrir a juegos de baile para consola. Los hay para todos los modelos
de consola y consisten básicamente en imitar coreografías
Desde luego, nunca hay que burlarse o reirse de la forma de bailar
del niño, sino por el contrario animarle a que lo siga haciendo a su
manera.
No queda duda de que bailar es beneficioso para los niños, incluso es utilizado con excelentes resultados para el tratamiento de algunos trastornos de desarrollo en la infancia.
Es una actividad placentera con ventajas físicas y emocionales que deberíamos practicar todos más a menudo.